El desarrollo de diversos campos de la ciencia en los últimos cien años ha supuesto grandes avances para la humanidad. Grandes descubrimientos científicos han convertido la propia experiencia de la vida a niveles antes insospechados.

Unos de los grandes cambios que se han originado con la investigación científica se relacionan con el área de salud. La erradicación y tratamiento de un sinnúmero de enfermedades es ahora totalmente posible gracias extraordinarios remedios. Pero muchos de ellos ni siquiera podrían llegar las urgidas manos de pacientes y médicos sino contaran con un simple recipiente o empaque.

La elaboración de envases de plásticos para medicamentos es un valioso eslabón de la cadena de producción farmacéutica. Fabricados principalmente con derivados de petroquímicos, estos recipientes constituye un mecanismo que facilita la disposición y entrega de productos orientados al sector salud.       

La industria del plástico: el motor detrás de cada envase

El popular polímero es sin duda uno de los actores principales del siglo XX. Toda la revolución que convirtió al plástico en el actor fundamental de la tecnología en los pasados lustros, sigue presente en el actual milenio.

Aunque el uso de los primero polímeros se remonta a las antiguas culturas mesoamericanas, que utilizaban derivados del caucho natural, su invención es relativamente reciente. El plástico tal como lo conocemos inicia su recorrido en la primera década del siglo XX.

Teniendo como antecedente a los primitivos polímeros termoestables desarrollados por Goodyear, el químico norteamericano Leo Baekeland en el año 1.909, abre las puertas de la era del plástico. Con la creación de un material no inflamable y totalmente sintético se desarrolla los primeros polímeros tal como lo conocemos hoy en día.

La continuación de la elaboración de nuevas resinas e incorporación de elementos químicos, dan como resultado que el plástico llega dominar por completo cualquier área de manufacturación. Sus extraordinarias características entre las que destaca su maleabilidad, impermeabilidad, resistencia entre otros lo hizo el favorito para envasar cualquier producto terminado.

De mano con el auge del plástico, la industria farmacéutica fue alcanzada un desarrollo realmente increíble durante el mismo periodo. El descubrimiento de nuevos elemento químico y su aplicación en fármacos para el tratamiento de enfermedades revoluciono la medicina moderna.

De las boticas a las modernas farmacias: bajo la sombra del plástico

Atrás van quedando los recuerdos de un farmaceuta preparando medicamentos en recipientes de vidrio o metal. La revolución del plástico le ofreció una oportunidad a la medicina moderna. La aparición de poderosos antibióticos como las sulfanilamida o las penicilinas masificaron los medicamentos a nivel mundial.

Como resultado natural de este salto en la medicina, los plásticos se involucraron como el complemento ideal para trasladar y resguardar los valiosos medicamentos. Sus inmejorables características asociadas principalmente a factores de salubridad y conservación, impusieron definitivamente a los polímeros como el material preferido de la industria farmacéutica.

Actualmente cerca del 70% de los productos orientados al sector de salud e incluyendo al cosméticos, son envasados en plásticos. Nuevas resina y polímeros han logrado ser totalmente reciclable, abriendo la oportunidad de este producto ser 100% ecológico.